Como operadora de infraestructura de transporte en 7 países, Aleatica aborda con éxito los desafíos inherentes a su compromiso de mantener altos estándares de ética y transparencia en todas sus actividades. La lucha contra la corrupción es un desafío constante en el sector, por lo que la compañía implementa diversas medidas para enfrentar esta problemática.
Uno de los principales retos es la necesidad de establecer un programa robusto de cumplimiento normativo en entornos donde la corrupción puede ser sistémica. Como empresa global que opera en múltiples jurisdicciones, cada una con sus propias
regulaciones y prácticas culturales, Aleatica adapta sus políticas y procedimientos a las normativas locales y mantiene altos estándares globales de ética y conducta.
Construir una cultura de transparencia y responsabilidad es un proceso que requiere tiempo y dedicación. La compañía trabaja de manera sólida para formar a sus colaboradores y socios comerciales sobre la importancia de la ética y la integridad en los negocios al incorporar estos principios en su día a día.

Entre los logros más destacados, Aleatica creó un Código de Ética y Conducta claro y accesible para todos los colaboradores y proveedores. Este documento, de fácil acceso, establece las expectativas de comportamiento y proporciona directrices claras para situaciones que podrían involucrar conflictos de intereses o prácticas corruptas.
Otro avance significativo es la implementación de capacitaciones regulares en ética y anticorrupción. Además de informar a los colaboradores sobre las políticas internas, estos programas también fomentan un diálogo abierto sobre la importancia de la integridad en el trabajo cotidiano mediante casos prácticos.
Un aspecto clave en el compromiso con la transparencia es el establecimiento de canales de denuncia seguros y confidenciales, que permiten a los empleados y terceros reportar conductas inapropiadas sin temor a represalias. A través del
canal ético “I CARE”, el número de denuncias y consultas se incrementó en los últimos tres años, lo que ha permitido identificar deficiencias en los procesos internos y realizar las mejoras necesarias.
Asimismo, hemos establecido alianzas con otras organizaciones para compartir y aprender las mejores prácticas en la lucha contra la corrupción. De cara al futuro, continuaremos la tarea de sensibilizar sobre los esfuerzos anticorrupción y de cumplimiento, mediante talleres, cursos de capacitación y campañas de comunicación interna.
Nota original publicada en Contra la Corrupción